Rehabilitación protésica
ResumenLos dispositivos protésicos comerciales no proporcionan actualmente información sensorial natural sobre la interacción con objetos o movimientos. Las desventajas subsiguientes incluyen una marcha no fisiológica con una pierna protésica y la dificultad para controlar la fuerza ejercida con una mano protésica, lo que genera problemas de salud. Restaurar la retroalimentación sensorial natural de la prótesis a los amputados es una necesidad clínica no cubierta. Un dispositivo óptimo debería ser capaz de provocar sensaciones naturales de tacto o propiocepción, mediante la entrega de las complejas señales al sistema nervioso que producirían los receptores de la piel, los músculos y las articulaciones. Esta revisión abarca los diversos enfoques neurotecnológicos que se han propuesto para el desarrollo de un dispositivo óptimo de restauración de la retroalimentación sensorial para amputados de brazos y piernas.
Nat. Mater. 20, 925-939 (2021). https://doi.org/10.1038/s41563-021-00966-9Download citationShare this articleAnyone you share the following link with will be able to read this content:Get shareable linkSorry, a shareable link is not currently available for this article.Copy to clipboard
Entrenamiento de la marcha con prótesis para amputados de las extremidades inferiores
ResumenAntecedentesLos pies protésicos son elásticos y su rigidez afecta de forma crítica a la estabilidad, comodidad y coste energético de la marcha del usuario. A pesar de la importancia de la rigidez en la deambulación, el proceso de prescripción a menudo implica probar un número limitado de prótesis, lo que puede resultar en que los pacientes reciban un pie con una mecánica subóptima. Para entender la resolución con la que las prótesis deberían ser optimizadas individualmente, buscamos caracterizar la sensibilidad psicofísica de los usuarios de prótesis por debajo de la rodilla a la rigidez de la prótesis.MétodosUtilizamos una novedosa prótesis de tobillo de rigidez variable para medir la repetibilidad de la rigidez preferida seleccionada por el usuario, e implementamos un experimento psicofísico para caracterizar la diferencia apenas perceptible de la rigidez durante la locomoción. ResultadosLos ocho sujetos con amputación por debajo de la rodilla mostraron una alta repetibilidad en la selección de su rigidez preferida (coeficiente medio de variación: 14,2 ± 1,7%) y fueron capaces de identificar correctamente un cambio de 7,7 ± 1,3% en la rigidez del tobillo (con una precisión del 75%).ConclusionesEsta alta sensibilidad sugiere que la rigidez del pie protésico debe ajustarse con un alto grado de precisión de forma individual. Estos resultados también ponen de manifiesto la necesidad de emparejar las nuevas herramientas de prescripción robótica y las caracterizaciones mecánicas de los pies protésicos.
Formación postprotésica
La adaptación y el uso de la prótesis pueden ser un periodo complicado. Muchos amputados están ansiosos por empezar el proceso de adaptación y utilizar su nueva prótesis inmediatamente. Sin embargo, el proceso de adaptación tiene dos fases: la prótesis temporal o preparatoria y la prótesis final o definitiva. Junto a estas fases hay múltiples consideraciones que debe tener en cuenta.
El siguiente paso del proceso es la creación de un encaje provisional. Esto se aplica tanto si su protésico opta por el vaciado tradicional como por el escaneado con Insignia. Se espera que los nuevos amputados lleven la prótesis temporal durante unos meses mientras el muñón sigue reduciendo su tamaño y madurando. Por otro lado, las personas que han llevado una prótesis tienen una etapa mucho más corta en el proceso de adaptación (normalmente de unos días a unas semanas).
La última parte del proceso es la prótesis final o definitiva. Su protésico decidirá cuándo es el momento de moldear la prótesis final o definitiva. Los nuevos amputados suelen utilizar la prótesis definitiva varios meses después de la operación. El técnico ortopédico necesita asegurarse de que el tamaño y la forma del muñón se han estabilizado definitivamente. Los usuarios de prótesis con experiencia harán que el vaciado de la prótesis definitiva se produzca rápidamente.
Fisioterapia de formación protésica
La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. ha aprobado hoy el sistema de implantes de prótesis osteoancladas para la rehabilitación de amputados (OPRA), el primer sistema de implantes comercializado en EE.UU. para adultos con amputaciones transfemorales -o por encima de la rodilla- y que tienen o se prevé que tengan problemas de rehabilitación con una prótesis de encaje convencional o no pueden utilizarla.
Una prótesis de pierna convencional utiliza una carcasa en forma de copa especialmente ajustada, denominada encaje, que se adapta a la parte restante de la pierna del paciente (el muñón que queda tras la amputación) para fijar el dispositivo a la pierna. Algunos pacientes pueden no tener un muñón lo suficientemente largo como para encajar adecuadamente una prótesis con encaje o pueden tener otras condiciones, como cicatrices, dolor, infecciones cutáneas recurrentes o fluctuaciones en la forma del muñón que les impiden poder utilizar una prótesis con encaje. El sistema de implantes OPRA se ancla e integra quirúrgicamente en el hueso restante del muslo del paciente para permitir la conexión con una prótesis externa.